Bueno, bueno, bueno...hacía tiempo que no me lo pasaba tan bien con la bici. Siempre me quejo que cuando salgo con alguien (como siempre me dejo llevar), pocas veces o nunca, hacemos trialeras. Pues bien, querías trialeras, toma trialeras !!!. Rocas, raíces, senderos superestrechos con mucha vegetación troncos por arriba, troncos por abajo, en fin, muy divertido.
Salvo un par de zonas en que cogimos un sendero de subida que tuvimos que acabar bajando de la bici porque era muy empinado y estrecho, y otro tramo de carretera, el resto espectacular.
Lo más increíble de todo, es que está pegado a Barcelona, uno se olvida de que esta en una ciudad, la inmersión en la montaña y desconexión de la urbe es total.
De hecho, de camino a la “carretera de las aigües”, punto de salida y subiendo por la avenida del Tibidabo, ya empecé a adelantar a un montón de gente en bici, gente que sale de su casa en bicicleta.
Solo dos peros : al final, y para que no se nos hiciera tarde, decidimos dejarnos caer en la misma “carretera de las aigües” al final de una trialera, y hacer el camino de vuelta totalmente en plano, unos 6 kms aprox. Madre mía...a las 13:15 de un domingo, ese camino parecía literalmente las ramblas. Bicicletas de paseo, bicicletas de montaña, corredores, paseantes, caminantes, familias enteras con el cochecito del bebé, perros, y seguro que me dejo alguna especie más...mezclado en este camino en ambos sentidos de la marcha. Íbamos literalmente esquivando de todo y pegando frenazos porque si no, nos comíamos a alguien o algo que venía de frente.
Salvo un par de zonas en que cogimos un sendero de subida que tuvimos que acabar bajando de la bici porque era muy empinado y estrecho, y otro tramo de carretera, el resto espectacular.
Lo más increíble de todo, es que está pegado a Barcelona, uno se olvida de que esta en una ciudad, la inmersión en la montaña y desconexión de la urbe es total.
De hecho, de camino a la “carretera de las aigües”, punto de salida y subiendo por la avenida del Tibidabo, ya empecé a adelantar a un montón de gente en bici, gente que sale de su casa en bicicleta.
Solo dos peros : al final, y para que no se nos hiciera tarde, decidimos dejarnos caer en la misma “carretera de las aigües” al final de una trialera, y hacer el camino de vuelta totalmente en plano, unos 6 kms aprox. Madre mía...a las 13:15 de un domingo, ese camino parecía literalmente las ramblas. Bicicletas de paseo, bicicletas de montaña, corredores, paseantes, caminantes, familias enteras con el cochecito del bebé, perros, y seguro que me dejo alguna especie más...mezclado en este camino en ambos sentidos de la marcha. Íbamos literalmente esquivando de todo y pegando frenazos porque si no, nos comíamos a alguien o algo que venía de frente.
IBP : 67AA
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